InuYasha Wiki
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La Vida de Miroku (弥勒の寿命, Miroku no Jumyō) es el centésimo quinto capítulo del manga InuYasha y el séptimo capítulo del Volumen 11.

Argumento[]

Inuyasha intenta detener a Miroku de utilizar el Agujero Negro, pero Miroku no lo escucha y absorbe una gran cantidad de demonios, aún cuando sus compañeros se preocupan mucho por su herida. Inuyasha golpea fuertemente a Mushin y se libera de las perlas gigantes, acudiendo rápidamente hacia donde estaba Miroku frente a la tumba de su padre para detenerlo y apartar el brazo del Agujero Negro. Inuyasha le dice a Miroku que si vuelve a abrir el Agujero Negro él mismo le romperá el brazo. Los demonios notan que Miroku cerró el agujero de su mano y atacan en horda sin temor, pero Inuyasha les asegura que no los dejará pasar de ese punto y abanica a Colmillo de Acero, consiguiendo una onda destructiva que aniquila de inmediato a todos los demonios, la espada de Inuyasha comienza a brillar mientras caen los cadáveres de los demonios y sus amigos se sorprenden del poder destructivo del ataque de Inuyasha, Kagome advierte que Inuyasha utilizó el poder real de Colmillo de Acero por primera vez y Sango se pregunta cómo lo logró con sólo la brisa de la espada. Sango nota que el Tsubo Tsukai escapa y lo ataca con su Hiraikotsu y lo parte por la mitad.

Posteriormente recuperan el Jarrón Tsubo y lo acercan a Mushin que había perdido la consciencia en su batalla contra Inuyasha, devolviendo a los Kokochuu al jarrón. Kagome y Sango se preocupan porque el monje no despierta aún después de haber sido liberado de los Kokochuu, pero Inuyasha llega y patea al monje que responde con ruidos propios de un ebrio, lo que despreocupa a las mujeres.

El grupo de Inuyasha espera a Miroku fuera del Templo de Mushin que el monje reparara el agujero de la mano de su amigo. El monje sale diciendo que Miroku está bien y ahora duerme y llama a Inuyasha para conversar. Inuyasha le pregunta a Mushin si no pudo reparar corectamente el agujero de la mano de Miroku y el monje responde que deben destruir a Naraku inmediatamente, ya que si bien hizo todo lo que pudo, el Agujero Negro ya está roto, lo que significa que la esperanza de vida de Miroku se redujo considerablemente. Alrededor de Miroku en el interior del templo se reúnen sus amigos quienes hablan de lo fuerte que es Miroku para perecer feliz cuando en realidad debe estar preocupado por su vida todo el tiempo. Inuyasha pregunta a Mushin cuánto tiempo más vivirá Miroku y el monje responde que no tiene idea, pero el Agujero Negro fue una maldición puesta por Naraku y que si puede destruirlo probablemente la maldición terminará y eso salvará a Miroku.

Miroku despierta y encuentra a su alrededor a sus amigos, Kagome le dice que ahora está bien ya que Mushin se encargó de tratarlo, Miroku mira con preocupación su mano y esto alarma a Sango y Kagome, pero sólo lo hace para aprovechar la distracción y manosear los glúteos de Sango. Kagome se sorprende de que Miroku sea un acosador aún en su estado, mientras Sango golpea a Miroku en la cabeza para verguenza de su seguidor Hachi, Inuyasha al ver esto piensa que Miroku no morirá tan fácilmente.

En el Castillo Hitomi, Naraku recibe a uno de los Saimyosho diciendo que fue el único capaz de regresar, tras escucharlo se entera de que Inuyasha destruyó un centenar de demonios con sólo una abanicada. Naraku se sorprende y piensa que Inuyasha se ha hecho fuerte, así que la próxima vez deberá mandar más de un centenar de Yokai. Naraku llama a un niño preguntándole si recuerda cómo mover su cuerpo y el niño asiente.

Apariciones[]

Personajes[]

Objetos[]

Lugares[]

Correspondencia con el Anime[]

Este capítulo corresponde completamente parte final del episodio 28 y parte inicial del episodio 29.

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